Quisiera abrir un pequeño debate sobre si es bueno o malo separar la figura del cargo público de la de coordinador, hablando de casos en los que sólo se cuenta con un representante.
Porque muchas veces dicen que sí es compatible, fatible y bueno, pero si dedica al cargo publico un 90% y al de coordinador, ya sea federal, regional o local otro 90%, me pregunto si no nos merecemos que dediquen el 100%.
Es una teoria que surge de lo que debería ser una tónica general, es decir, cuando sea posible y conveniente, aplicar la no concentración de cargos dentro de la organización.
Así sería más facil la colaboración esporadica con el partido y el no abandono de amistades ajenas a IU, que es mala práctica y hace perder la perspectiva de las cosas.
Yo personalmente preferiria (y mas en la actual situacion de IU) separar los cargos.
ResponderEliminarY no solo por la dedicación, sino porque las cualidades que se necesitan para ser portavoz parlamentario y para ser coordinador son diferentes.
Así uno puede ser un buen parlamentario o un mal coordinador o al reves.